Ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, en seminario de la UdeC: “Para un desarrollo equitativo, la descentralización es clave”
Entre los avances y desafíos más relevantes respecto del traspaso de competencias a las regiones, Esteban Valenzuela, ministro de Agricultura, resaltó que tras el paso de varios gobiernos, recién este año se han logrado acciones orientadas en base a tres ejes fundamentales. “La descentralización como eje que habilita el bienestar y la justicia territorial; redistribuir poder para permitir el desarrollo de las regiones junto a los llamados principios orientadores entre los que se encuentran el diálogo, confianza, gradualidad, corresponsabilidad (de los Gobiernos Regionales y municipios), mayor pertinencia local y cultural de las políticas”, afirmó.
Lo anterior, en el marco de una actividad organizada por la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, el centro Creasur y el Departamento de Administración Pública, todos de la Universidad de Concepción en la que participaron el decano de la Facultad, Rodolfo Walter; la directora de Creasur, Violeta Montero, la seremi de Agricultura, Pamela Yáñez y Armando Cartes, profesor titular UdeC y director del núcleo de investigación Creasur, entre otros asistentes.
En la instancia, la directora de Creasur, Violeta Montero destacó, además del rol del actual ministro de Agricultura en la fundación de la institución, un estudio realizado por el núcleo de investigación respecto del traspaso de competencias que en opinión de algunos funcionarios del Gobierno Regional habría provocado un importante impacto en la discusión pública y política sobre esta materia.
“Fue un estudio que caracterizaba el desafío, que recogió la voz de las autoridades políticas de los Gobiernos Regionales y de los distintos ministerios a través de las secretarías regionales ministeriales y de la sociedad civil preguntando por los impactos y desafíos de traspasar competencias dando más poder a las regiones”, señaló la directora.
Desafío social y cultural
A su vez, Montero puso énfasis en que se trata de desafíos que no solo abarcan el ámbito técnico que requiere de preparación en gestión de política pública, gestión de presupuestos, gestión con la ciudadanía y los territorios, sino que también es un desafío social y cultural.
Al respecto, el titular de la cartera de Agricultura expuso que desde el Ministerio hay consciencia de que existe un reto relevante en cuanto a realizar un abordaje multidimensional en relación al traspaso de competencias y una mayor descentralización que incluya “una agricultura verde, diversa e inclusiva”. También, Valenzuela apuntó a que entre los desafíos que existen está la pérdida de diversidad que será enfrentada a partir del próximo año, a través de un programa de su ministerio que busca recuperar la pérdida del 80% de la producción de legumbres en los últimos 15 años. “Si queremos un desarrollo equitativo es fundamental la descentralización y por eso el concepto de Estado Regional con niveles de autonomía, con Ley de Rentas, junto con distribuir poder a las regiones (con los principios orientadores)”, indicó.
En resumen, los desafíos más relevantes en materia de traspaso de competencias a las regiones según el ministro de Agricultura incluyen “una política más vigorosa en el rescate de suelos, falta de mano de obra, mejorar la red de turismo rural, optimizar del riego y la puesta en marcha de una nueva red ferroviaria”.
Más recursos para agricultores
Eduardo Fuentealba, agricultor de la zona de Bulnes y usuario de Indap expresó que está de acuerdo con las acciones que buscan un traspaso real de competencias a las regiones, sin embargo, su principal preocupación tiene que ver con el requerimiento de mayores recursos para su sector. “Hay recursos pero no son suficientes para toda la masa agrícola porque hay gente que realiza agricultura informal, que no está catastrada para recibir ayudas del Estado, donde se necesita transformar políticas actuales en ley para que estén los recursos”, priorizó.
Ante la pregunta de Fuentealba, el Ministro Valenzuela respondió que espera que a través de la aprobación de la reforma tributaria en el 2024 y con una ley de rentas regionales sea posible contar con mayores recursos.
Recuperación de suelos
Por su parte, Desiderio Bustos, agricultor certificado por la Cámara Agrícola de Hanover, quien dijo ser especializado en el compostaje industrial, manifestó su preocupación respecto de leyes (Ley 24.312) que habrían sido promulgadas el año 2.000 que incentivarían la recuperación de suelos degradados y que incluirían la recuperación de 20 metros cúbicos de compost por hectárea.
De acuerdo con Bustos, Biobío tendría 1.180.000 hectáreas erosionadas por lo que la cantidad de compost por producir sería bastante alta y generaría alrededor de 400 mil toneladas al año de residuos orgánicos con los que se podrían fertilizar o recuperar 18.300 hectáreas.