Proyectan rol clave de mascarillas ante nueva subvariante de Covid-19
Desde el 1 de octubre el uso de las mascarillas sólo es obligatorio en recintos de salud y recomendado en lugares cerrados con aglomeración de personas y en el transporte público. Sin embargo la protección del barbijo, para los especialistas, podría retomarse debido a la presencia de las subvariante de la Ómicron, BQ.1, llamada en redes sociales perro del infierno, debido a su alto poder de contagio.
De hecho, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la subvariante ya está presente en 65 países que han visto un aumento de infectados, por ejemplo, en China que ya llevó a retomar el confinamiento en ciudades como Shijiazhuang y Guangzhou, además del testeo masivo y cerró colegios en el suroeste para evitar aumento de infectados.
A nivel país, la ministra Ximena Aguilera confirmó la presencia de la variante el 12 de noviembre, asegurando que tiene un alto poder de contagio, pero sin indicar el número de afectados por la BQ.1 ni las zonas en que estaría presente, pero los especialistas advierten que por su alto nivel de contagio no sería extraño que ya haya llegado a la Región, aunque desde la Seremi no se han pronunciado al respecto.
A pesar de ello, la ministra Aguilera realizó un llamado a la vacunación y destacó que Chile es el único país en Latinoamérica que cuenta con la vacuna bivalente, “que tiene la cepa que está circulando por todo el mundo”.
Para Maritza Muñoz, epidemióloga del departamento en Salud Pública y parte del equipo Prosalud de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, la población chilena está más protegida que la comunidad mundial debido al alto nivel de vacunación que existe en Chile y a la fórmula bivalente que constituye una protección mayor, especialmente, para adultos mayores y personas inmunodeprimidas.
Ahora bien, según la especialista, el uso de la mascarilla ayudaría a protegerse del contagio, sobre todo, considerando que la Ómicron tenía una tasa de contagio de 1 es a 4 y que la subvariante, que se caracteriza por una tos seca constante, alcanzaría de 6 a 8 infectados por cada enfermo.
“Ahora si las tasas de contagio suben y la ocupación de camas críticas aumenta es claro que podemos llegar a tener medidas restrictivas. Para evitarlo se deben usar mascarillas en lugares cerrados, con aglomeración, en el transporte público y en el mall obviamente”, dijo y explicó que una de tres capas puede lograr protección de hasta 60% y la KN95, tal como lo dice su nombre de 95%.
En tanto, el presidente del Colegio Médico, Germán Acuña, aseveró que es necesario que se retome la vigilancia epidemiológica y secuenciación de los casos de Covid-19 para determinar la situación real que está viviendo la Región y cada zona del país con respecto a la subvariante. “Creemos que se deberían retomar las mesas territoriales de salud para tratar este y otros temas (…) pero hay un centralismo brutal”, dijo.
Recomendó el uso de mascarillas en la Región debería ser aconsejado para grupos especiales: niños, colegios, locomoción colectiva y lugares de hacinamiento. “Que cada uno se cuide, nadie va a poder reemplazar nuestra propia vocación de autocuidado. El uso de la mascarilla puede ser un buen compañero, solidario porque impedirá que nos contagiemos y contagiar a otros”.