Biobío: ocupadas de más de 55 años de edad crecen en 11,5%
De acuerdo a las cifras laborales de la Región del Biobío publicadas por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) en relación a las personas ocupadas según el tramo etario y sexo, la principal incidencia en las mujeres se observó en el tramo 55 y más años, con un aumento de 11,5% (incidencia 2,1 puntos porcentuales).
Esto puede verse como algo positivo en un contexto de participación laboral femenina que tras la pandemia bajó de manera significativa (a un 35% aproximadamente) y que ha tenido una tendencia a la recuperación en la zona a niveles previos a los efectos del Covid 19.
Sandra Quintana, seremi del Trabajo y Previsión Social dijo que lo anterior se explica principalmente “porque las mujeres de 55 años ya han concluido su etapa de primeras cuidadoras, por tanto, mejoran sus condiciones familiares como para salir del hogar en busca de trabajo y mantenerse en ellos”.
“Muchas de ellas ingresan en el mundo del trabajo informal por diversas razones, entre ellas, porque disponen de más tiempo para distribuirlo entre el trabajo y labores del hogar, (venta de productos de alimentos o reventa de otros productos). En el caso de asalariadas formales se explica este aumento por su incorporación en la administración pública o prestación de servicios”, agregó la seremi.
En cuanto a los apoyos gestionados a través del Ministerio del Trabajo en la zona, Sandra Quintana resaltó que “hay sectores laborales que por años han estado marcados por la presencia masculina, tales como la construcción, manejo de maquinaria pesada, entre otras. Es por eso, que a través del Sence se han impartido distintos cursos de capacitación en estas áreas, con el fin de nivelar la presencia de ambos géneros y a su vez, abrir otros campos para las mujeres, brindando así más puestos de empleo. En nuestra región, son cada vez más las mujeres que se animan a aprender a fabricar muebles, conducir maquinaria pesada y adquirir conocimientos en la construcción. Esto les permite obtener también mejores remuneraciones”.
Tasa de participación laboral
Por su parte, el Dr. Luis Méndez, director del Observatorio Laboral Sence Biobío y académico de la Universidad del Bío-Bío (UBB), afirmó que la tasa de participación laboral de las mujeres de la zona, en general, es baja comparada con otras regiones.
Recordó que la participación laboral de la mujer “en el trimestre febrero-marzo-abril de 2023 fue de 47,7% mientras que en regiones como Antofagasta llegó a 53,8% y Magallanes, a 59,8%. Y en el mismo trimestre, pero del año 2021, tuvimos una tasa de 38,3%”.
En el boletín Termómetro Laboral de agosto de 2023 del Observatorio Laboral Sence Biobío, se publicó que, en el caso de las mujeres este indicador (participación laboral de la mujer) solo llegó a un 45,6% (324.593) con un crecimiento en 12 meses de 0,8 puntos porcentuales, equivalentes a 8.137 personas nuevas. Dicha tasa manifiesta un aumento respecto al mismo trimestre en los últimos tres años, sobre todo en el caso de las mujeres comparando con 2021, se indicó en el documento. En países OCDE la tasa llega a un 70% en promedio.
“Esto(participación laboral de la mujer) debe ser un tema de preocupación, pues una baja tasa de participación significa que un grupo importante de personas con niveles de escolaridad similares a los de los hombres no está formando parte de la fuerza de trabajo y ello implica capital humano que no está siendo aprovechado”, enfatizó el director del Observatorio Laboral Sence Biobío.
A su vez, explicó que “las mujeres fueron muy comprometidas en el periodo de la pandemia donde la tasa de participación cayó mucho a casi un 35% cuando históricamente esta cifra ha sido de alrededor de un 45% en Biobío y en los últimos meses se ha venido recuperando bastante tendiendo a los números previos de la pandemia”.
Respecto a las proyecciones de la tasa de participación femenina, el académico de la UBB expresó que “una vez que termine de recuperarse el umbral histórico, no va a seguir creciendo mucho más porque existe un problema estructural que afecta mucho a las mujeres debido a que no cuentan con redes para incorporarse a fuentes de trabajo y son quienes mayormente cuidan a los niños y adultos mayores y generalmente se postergan y no entran al mercado laboral porque deben hacerse cargo de esas labores que no remuneradas”.
Pacto Fiscal
En la visión del Dr. Luis Méndez, el Pacto Fiscal se hace cargo en alguna medida de lo que llamó “Economía de los cuidados” de forma tal que “dentro del Pacto Fiscal que propone el Ministro Mario Marcel se busca incorporar el tema de los cuidados de manera que pueda transferirse algún tipo de remuneración a las mujeres que tienen labores de cuidado de otras personas como postrados y discapacitados”.
En relación a los sectores económicos regionales que concentran mayor ocupación de mujeres, Méndez sostuvo que muchas se encuentran en el área de servicios sociales y personales, junto con el comercio.
En sentido, Pilar Varela, presidenta de Protur Biobío-Ñuble, gremio del sector turismo, respecto de las oportunidades de participación laboral femenina que ofrece el turismo regional dijo que “es un área que tiene una participación femenina muy importante (…) tiene relación con las labores de restauración, alojamiento, atención clientes, turismo aventura. En cargos ejecutivos y de dirección falta avanzar”.
Aporte a la economía
Según estimaciones publicadas por ONU Mujeres, el Producto Interno Bruto (PIB) mundial anual, sería 26% más alto en 2025 si las mujeres participaran en la economía en la misma proporción que los hombres.
En el caso de Chile, durante un día de semana las mujeres participan 95,5% en el trabajo no remunerado, destinando a ello 6,07 horas en promedio, mientras que los hombres participan en 87,2% y destinan sólo 2,74 horas en promedio (Cámara de Diputados, 2021) de acuerdo a lo publicado por el Observatorio Laboral Metropolitana Sence.